Somos lo que comemos, quemamos lo que queremos

Somos lo que comemos, quemamos lo que queremos

Todos hemos escuchado alguna vez la expresión somos lo que comemos utilizada cotidianamente para dar o recibir consejos respecto a cómo cuidar de nuestra salud.

La expresión fue escrita en 1850 por el filósofo y antropólogo alemán Ludwig Feuerbach y está incluida en una reseña sobre el libro Enseñanza de la alimentación para el pueblo, de Jacob Moleschott en su versión extendida: “Si se quiere mejorar al pueblo, en vez de discursos contra los pecados, denle mejores alimentos. El hombre es lo que come”.

Aunque la frase de Feuerbach está inscrita en un universo más complejo, lo que quiere decir es que elegir una buena alimentación nos permite alcanzar una sana condición física y mental.

Nutrirse es un derecho universal del cual depende no solo nuestra calidad de vida, sino la imagen que queremos construir de nosotros mismos.

Así que si eres de los que acumulan montones de alegrías y manolitos en los michelines y quieres quemarlos, te ofrecemos una gran aliada, que en menos de 1 mes te dejará con hasta 7 centímetros menos de grasa corporal y una gran sonrisa.

Somos lo que quemamos.

Las transformaciones, por pequeñas que parezcan, se logran a través de la constancia y el esfuerzo, aunque a veces necesitamos un pequeño empujón para arrancar.

No existen soluciones mágicas ni repentinas, sobre todo si queremos pertenecer al bando de los que persiguen un aspecto saludable a largo plazo; pero actualmente contamos con grandes aliados que nos pueden ayudar a mejorar todo aquello que nos preocupe, como por ejemplo los depósitos de grasa que se acumulan con el paso del tiempo.

Nuestra crema reductora para eliminar la grasa localizada en zonas complicadas, combina ingredientes de altísima efectividad sobre la capa superficial de la piel, y además de ser agradable al tacto y tener un olor increíble, incorpora un potente estimulador de la lipólisis que acelera la quema de grasa, activa la circulación y estimulan los adipocitos (células que forman el tejido adiposo).

Una de las claves para que funcione es ser constante en su aplicación y utilizarla dos veces al día. Muchos expertos recomiendan aplicarla justo después de practicar deporte, ya que potencian la quema de grasa gracias a la temperatura de nuestro cuerpo.

Su efectividad será mayor siempre que la acompañemos de una buena rutina de ejercicios y una alimentación rica en nutrientes.

Y recuerda que, un cuerpo bonito es aquel que tiene a una persona feliz por dentro.